Un equipo científico del Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN) y del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), ambas entidades dependientes del Cabildo Insular de Tenerife, ha materializado durante el pasado mes de junio la campaña científica sobre geoquímica de emanaciones difusas en el volcán Dorsal Noreste de Tenerife Vieja que con una periodicidad anual se realiza desde el año 2001. El objetivo de la campaña de 2017 es evaluar la actual tasa de emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) y otras especies volátiles a la atmosfera por este edificio volcánico con la finalidad de contribuir a mejorar su programa de vigilancia volcánica. La planificación y ejecución de esta campaña científica ha sido posible gracias al proyecto TFVOLCANO “Monitorización e investigación sobre la actividad volcánica de Tenerife” que financia el Programa Tenerife Innova que coordina el Área Tenerife 2030 del Cabildo Insular de Tenerife.
En esta campaña geoquímica 2017 de la Dorsal Noreste de Tenerife han participado dos estudiantes universitarios procedentes de las universidades de Stony Brook y St. Lawrence, ambas en el estado de Nueva York (EE.UU. de América), a través del programa de prácticas que promueve la empresa británica GeoTenerife en colaboración con el INVOLCAN. Para la materialización de esta campaña se han realizado centenares medidas in-situ de flujo difuso de dióxido de carbono (CO2) y sulfuro de hidrógeno (H2S), así como recogidas más 1.900 muestras de gases en la atmósfera del suelo para su posterior análisis químico e isotópico. Estas medidas y toma de muestras de gases se han realizado en aproximadamente 650 puntos de observación distribuidos a lo largo y ancho de los 210 kilómetros cuadrados investigados del volcán Dorsal Noreste de Tenerife, siguiendo criterios volcano-estructurales y de accesibilidad.
Los resultados preliminares obtenidos en esta campaña geoquímica 2017 reflejan que la actual emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera por la Dorsal Noreste de Tenerife alcanza las 1.300 toneladas diarias. Esta tasa de emisión es superior al valor promedio observado para este sistema volcánico hasta la fecha, aproximadamente 400 toneladas diarias, y ligeramente superior al valor máximo del rango de valores sobre emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) que pueden considerarse normales para el volcán Dorsal Noreste durante un periodo de fase inter-eruptiva o tranquilidad; entre las 140 y las 1.100 toneladas diarias. Emanaciones difusas ligeramente anómalas y relativamente superiores a las 1.100 toneladas diarias en la Dorsal Noreste de Tenerife se han registrado puntualmente en el año 2007 y durante las últimas 4 campañas científicas realizadas desde el año 2013 por el equipo INVOLCAN/ITER que lleva 17 años monitorizando este importante parámetro geoquímico para la vigilancia volcánica.
Estas emanaciones difusas de dióxido de carbono (CO2) son silenciosas y dispersas, no son perceptibles a las personas dado que son muy débiles, se diluyen rápidamente en el aire, y no son visibles al ojo humano; por lo tanto, no representan un peligro para las personas. Por el contrario, la monitorización de este parámetro geoquímico es de una gran utilidad para el fortalecimiento del sistema de alerta temprana ante posibles erupciones volcánicas y crisis sismo-volcánicas como se ha podido comprobar en otros sistemas volcánicos que han experimentado episodios de reactivación volcánica. Además el interés y la importancia de estos trabajos sobre emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) a través de toda la superficie del sistema volcánico para la vigilancia volcánica, se debe a que la información generada por este tipo de campañas científicas no se puede obtener a través de redes instrumentales permanentes.